TEXTO DIARIO, De hoy Lunes 8 de marzo del 2021.

Examinemos las Escrituras todos los días 2021

Lunes 8 de marzo del 2021

Pondré un bozal, sí, como guardia para mi propia boca, mientras esté alguien inicuo enfrente de mí (Sal. 39:1).

Durante una proscripción, debemos identificar cuándo es el “tiempo de callar” (Ecl. 3:7). Tenemos que proteger la información delicada, como los nombres de los hermanos, los lugares donde nos reunimos, cómo predicamos y cómo recibimos el alimento espiritual. No debemos revelar estos datos a las autoridades ni comentarlos con amigos o parientes del país o de otros países. Si lo hiciéramos, pondríamos en peligro a nuestros hermanos. No permitamos que los pequeños problemas nos dividan. Satanás sabe que una casa dividida no puede permanecer en pie (Mar. 3:24, 25). Por eso, siempre tratará de dividirnos. De ese modo, espera que empecemos a pelear entre nosotros en lugar de pelear contra él. Hasta los cristianos maduros deben estar atentos para no caer en esta trampa. Si nos esforzamos por superar las diferencias con nuestros hermanos, evitaremos la trampa de la desunión (Col. 3:13, 14). w19.07 11, 12 párrs. 14-16.




TRAMPAS QUE DEBEMOS EVITAR

¿Por qué no debemos desobedecer las instrucciones?

No desobedezcamos las instrucciones. Si hacemos lo que nos dicen los hermanos responsables y confiables, nos libraremos de problemas (1 Ped. 5:5). Veamos un ejemplo. En un país donde la obra está proscrita, los hermanos recibieron la instrucción de no dejar publicaciones en la predicación. Pero un precursor creyó que sabía hacer las cosas mejor y no hizo caso. ¿Qué sucedió? Un día, tras predicar informalmente, la policía los interrogó a él y a otros hermanos. Al parecer, agentes del gobierno los habían seguido y habían conseguido todas las publicaciones que habían dejado. ¿Qué aprendemos? Que tenemos que obedecer las instrucciones aunque creamos que sabemos hacer las cosas mejor. Jehová nos bendecirá siempre si colaboramos con los hermanos a los que ha nombrado para dirigirnos (Heb. 13:7, 17).

¿Por qué no debemos poner normas innecesarias?

No pongamos normas innecesarias. Si los ancianos hacen esto, impondrán una carga a los demás. El hermano Juraj Kaminský explicó lo que ocurrió durante la proscripción en la antigua Checoslovaquia: “Cuando se detuvo a los hermanos responsables y a muchos ancianos, algunos que dirigían las congregaciones y los circuitos empezaron a establecer normas de conducta para los publicadores. Prepararon listas de lo que debían hacer y lo que no”. Jehová no nos ha dado autoridad para tomar decisiones por los demás. Quien pone normas innecesarias no protege a los hermanos, sino que trata de ser amo de su fe (2 Cor. 1:24).

NUNCA DEJEMOS DE SERVIR A JEHOVÁ

Según 2 Crónicas 32:7, 8, ¿por qué podemos tener confianza a pesar de los esfuerzos de Satanás?

Nuestro mayor enemigo, Satanás, no dejará de perseguir a los siervos fieles de Jehová (1 Ped. 5:8; Rev. 2:10). Tanto él como los que lo apoyan tratarán de prohibir nuestra obra. Pero no hay motivo para que el miedo nos paralice (Deut. 7:21). Jehová está con nosotros y seguirá apoyándonos aunque se proscriba nuestra obra (lea 2 Crónicas 32:7, 8).

¿A qué está usted resuelto?

Imitemos la actitud decidida de nuestros hermanos del siglo primero, que dijeron a los gobernantes: “Si es justo a vista de Dios escucharles a ustedes más bien que a Dios, júzguenlo ustedes mismos. Pero en cuanto a nosotros, no podemos dejar de hablar de las cosas que hemos visto y oído” (Hech. 4:19, 20).

Todos los Derechos Reservados Copyright © 2020 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania JW.ORG.

Por toolsjw

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *