TEXTO DIARIO, De hoy Martes 18 de julio 2023, No le pondré la mano encima a mi señor (1 Sam. 24:10).
Examinemos las Escrituras todos los días 2023
Martes 18 de julio
Tienen que ser santos porque yo soy santo (1 Ped. 1:16).
Las palabras del texto de hoy nos enseñan que sí podemos imitar a Jehová, el ejemplo supremo de santidad. Debemos ser santos en nuestra conducta, aunque parezca imposible debido a nuestra imperfección. El mismo apóstol Pedro se equivocó varias veces, pero su ejemplo nos demuestra que podemos ser santos. Cuando piensan en alguien santo, muchos se imaginan a un personaje religioso de aspecto melancólico y triste, como los que se representan en algunas obras de arte. Pero nada más lejos de la realidad. La Biblia dice que Jehová, que es santo, es el “Dios feliz” (1 Tim. 1:11). También dice que el pueblo que lo adora es feliz (Sal. 144:15). Jesús condenó a los que llevaban túnicas largas y hacían lo que es correcto para que otros los vieran (Mat. 6:1; Mar. 12:38). Los cristianos sabemos qué es la santidad por lo que la Biblia nos dice. Y sabemos que nuestro cariñoso Dios nunca nos diría que hiciéramos algo imposible de obedecer. w21.12 2 párrs. 1, 3.
¿Qué significan las palabras santo y santidad?
¿Qué es ser santo? En la Biblia, las palabras santo y santidad se refieren básicamente a lo que es limpio o sagrado en sentido moral y religioso. Estos términos también pueden transmitir la idea de estar apartado o separado para servir a Dios. En otras palabras, seremos santos si estamos limpios en sentido moral, si adoramos a Jehová como él espera y si tenemos una estrecha relación con él. Nos impresiona pensar que nosotros, que somos tan imperfectos, podemos ser amigos de Jehová, que es absolutamente santo.
¿Qué nos enseñan de Jehová los ángeles fieles?
Jehová es puro y limpio en todos los sentidos. Esto fue lo que dijeron algunos serafines, que son ángeles que están cerca del trono de Jehová. Proclamaron: “Santo, santo, santo es Jehová de los ejércitos” (Is. 6:3). Claro, para tener una relación tan estrecha con Dios, ellos mismos deben ser santos, y lo son. Por eso, cuando un ángel de Jehová venía a la Tierra, su sola presencia podía volver santo el lugar donde estaba. Esto es lo que ocurrió cuando Moisés se acercó a la zarza ardiente (Éx. 3:2-5; Jos. 5:15).
Según Éxodo 15:1, 11, ¿cómo destacó Moisés que Dios es santo? ¿Qué les recordaba a los israelitas que Dios es santo? (Vea el dibujo de la portada).
Después de que Moisés llevó a los israelitas a través del mar Rojo, destacó que su Dios, Jehová, es santo (lea Éxodo 15:1, 11). La conducta de los que adoraban a los dioses de Egipto no era santa en lo más mínimo. Y lo mismo puede decirse de los que adoraban a los dioses de Canaán, que sacrificaban a niños y practicaban actos sexuales depravados para sus dioses (Lev. 18:3, 4, 21-24; Deut. 18:9, 10). Pero Jehová es muy diferente a esos dioses falsos, pues nunca nos pide que hagamos nada que nos rebaje. Él es totalmente santo. Esto quedaba claro por las palabras inscritas en una placa de oro que el sumo sacerdote llevaba en el turbante. Decían: “La santidad le pertenece a Jehová” (Éx. 28:36-38).
Lo que decía aquella placa le dejaba claro a cualquier persona que la veía que Jehová es santo en grado supremo. Pero ¿y si un israelita no veía la placa porque no podía acercarse al sumo sacerdote? ¿Tendría alguna manera de saber que Jehová es santo? Claro que sí. Todos los israelitas podían escucharlo cuando se leía la Ley delante de los hombres, las mujeres y los niños (Deut. 31:9-12). Si hubiéramos estado ahí, habríamos escuchado estas palabras: “Yo soy Jehová su Dios, […] y ustedes tienen que ser santos porque yo soy santo” y “ustedes tienen que ser santos porque yo, Jehová, soy santo” (Lev. 11:44, 45; 20:7, 26).
¿Qué nos enseñan las palabras de Levítico 19:2 y 1 Pedro 1:14-16?
Centrémonos en unas palabras que se leían a toda la nación de Israel y que encontramos en Levítico 19:2. Jehová le dijo a Moisés: “Habla con todo el pueblo de Israel y diles: ‘Tienen que ser santos porque yo, Jehová su Dios, soy santo[’]”. Puede que el apóstol Pedro haya citado estas palabras cuando les dijo a sus compañeros cristianos: “Sean santos” (lea 1 Pedro 1:14-16). Es cierto que ahora no estamos bajo la Ley de Moisés, pero lo que Pedro escribió confirma lo que aprendemos en Levítico 19:2: que Jehová es santo y que los que lo aman deben esforzarse por serlo. Esto nos aplica a todos, sea que esperemos vivir en los cielos o en un paraíso en la Tierra (1 Ped. 1:4; 2 Ped. 3:13).
Todos los Derechos Reservados Copyright © 2020 Watch Tower Bible and Tract Society of Pennsylvania JW.ORG.
NOTA: Los anuncios que aparecen en este Sitio, son únicamente para costear los gastos implicados que requieren mantener una página. Por lo tanto este sitio no se responsabiliza de «Los contenidos de las publicidades que aparecen», ya que los anunciantes publicitarios no son Testigos de Jehová. De modo que se le sugiere no prestar atención ni confiar en dichos anuncios. Atentamente TOOLSJW.COM.
IMPORTANTE: Saludos Cordiales mis Queridos Hermanos, les informamos que estamos teniendo problemas con la aplicación en Google Play, lo animamos a descargar nuestra aplicación interna solo hasta que solucionemos el problema, Y tenga la seguridad que esta aplicación es muy confiable y lo mejor es que ya «NO CONTIENE ANUNCIOS», solo que por no ser de Google Play les saldrá un mensaje de advertencia, pero no se preocupe está libre de virus. Muchas gracias por su comprensión, y que Jehová los llene de bendiciones este día, para descargarlo clic abajo ↓